El presidente de la Asociación de Ejecutivos de Recursos Humanos de la Industria Automotriz en San Luis Potosí (ADERIAC), Daniel Escobedo, advirtió sobre las posibles repercusiones laborales que podrían derivarse de la incertidumbre económica actual, especialmente por el impacto de los aranceles y otros factores geopolíticos, como el proceso electoral en Estados Unidos y la relocalización de inversiones globales.
En entrevista, Escobedo indicó que mientras muchos medios y analistas se enfocan en los efectos macroeconómicos de los aranceles, hay una dimensión poco abordada: el impacto directo sobre los trabajadores y la empleabilidad en la región.
“La mayoría habla de cómo afectará esto a los empresarios o al tipo de cambio, pero el verdadero impacto lo sentiremos los trabajadores, en nuestros bolsillos y en nuestro empleo”, declaró.
Según explicó, el reciente anuncio del Fondo Monetario Internacional, que prevé un crecimiento económico nulo para México en 2025, es una señal de alerta. “Un escenario de crecimiento cero significa que no habrá expansión en el número de empleos, ni aumento en la actividad industrial. Es decir, nos estancamos”, dijo.
Escobedo detalló que, en caso de que el país entrara en recesión —como han anticipado otros organismos—, sí podría haber despidos, especialmente en sectores como la industria automotriz, donde se concentra gran parte de la actividad económica en San Luis Potosí.
Además, mencionó que el impacto en el ingreso de las familias trabajadoras podría presentarse en dos frentes: por un lado, un posible aumento en los precios de productos y servicios, y por otro, el riesgo de pérdida de empleos.
Respecto al proceso de nearshoring, Escobedo aclaró que las inversiones vinculadas a esta tendencia no se han detenido, pero recordó que se trata de proyectos con una visión de largo plazo. “Las empresas están apostando a inversiones que rendirán frutos en 5, 10 años. Por eso, aunque el nearshoring sigue en marcha, no resuelve los desafíos del corto plazo”, apuntó.
Ante este panorama, el líder empresarial hizo un llamado a la cautela y a la preparación tanto por parte de los trabajadores como de las autoridades.
“A los trabajadores les diría que no entren en pánico, pero que tampoco bajen la guardia. Es momento de cuidar el empleo, mantener un buen desempeño y continuar desarrollando habilidades”, recomendó.
Asimismo, instó a los tres niveles de gobierno a tomar en cuenta esta posible afectación social. “No basta con enfocarse en los indicadores económicos. Se debe contemplar el impacto humano que tendría una crisis laboral en miles de hogares potosinos”, concluyó.