Este martes, un incendio de grandes proporciones se desató en la entrada de la colonia San Francisco, en el municipio de Soledad de Graciano Sánchez, a un costado de la carretera Matehuala.
El siniestro tuvo su origen en la antigua fábrica “La Química de Elgar”, un edificio abandonado desde hace años, que ahora se ha convertido en el epicentro de una emergencia que mantiene en alerta a la comunidad.
El incendio, que ha consumido alrededor de 2 mil tarimas y sigue activo, ha obligado a las autoridades a evacuar a 400 personas de la zona. A medida que las llamas avanzan, la radiación calorífica generada por el fuego se extiende a un radio de 50 metros, lo que agrava la situación tanto para los bomberos como para los residentes cercanos. Hasta el momento, al menos un bombero ha sufrido intoxicación debido a la exposición a los gases tóxicos generados por el incendio.
Los equipos de emergencia, encabezados por el Cuerpo de Bomberos de la Zona Metropolitana, han enfrentado serias limitaciones en cuanto a recursos. Con solo 28 bomberos y unas pocas pipas disponibles, la respuesta inicial ha sido insuficiente para controlar el fuego. Aunque se solicitaron refuerzos, las autoridades solo han podido enviar alrededor de 20 pipas de la Comisión Estatal de Agua (CEA), una de Interapas, así como apoyo del equipo especializado de Pemex. Sin embargo, los bomberos señalaron que serían necesarias al menos 50 pipas más para sofocar el incendio de manera efectiva.
La falta de un perímetro de seguridad adecuado ha generado preocupación entre los habitantes de la zona. Además de las evacuaciones de al menos dos complejos habitacionales y una escuela primaria, los vecinos temen por los posibles efectos del humo y los gases tóxicos en su salud. “Nos están evacuando, pero ¿cómo sabemos que están haciendo todo lo posible para apagar el fuego?”, expresó una residente mientras huía con su familia de la zona afectada.
Hasta incendio sigue y las autoridades no han confirmado la causa, aunque se sospecha que pudo haber sido provocado. A medida que continúan los esfuerzos para sofocar el fuego, las autoridades han cerrado varias vialidades cercanas, incluidas la carretera Matehuala y otras calles colindantes, para proteger a la población y evitar más riesgos.