El incendio registrado en la bodega de la calle Valentín Amador , a unos metros de carretera Matehuala dentro del municipio de Soledad de Graciano Sánchez, fue un golpe de realidad para los bomberos de San Luis Potosí.
Mientras ellos luchaban contra el fuego en condiciones extremas, con equipos viejos y trajes rotos, quedó al descubierto lo que han denunciado desde hace meses: la falta de apoyo, la precariedad laboral y la ausencia de respuestas claras sobre el uso de los recursos destinados a la corporación.
Francisco Portillo Fuentes, presidente de la mesa directiva del H. Cuerpo de Bomberos de SLP, recordó que luego de varios paros laborales en 2024 para exigir mejoras, lo único que consiguieron fue un aumento de 34 pesos diarios en su salario.
“El Patronato “Comité Pro-Cuerpo de Bomberos de San Luis Potosí, S.L.P., A.C., no valora nuestro trabajo. Nos tratan como si hiciéramos un oficio común, cuando nosotros arriesgamos la vida a diario en incendios y emergencias. No podemos conformarnos con un salario indigno”, señaló.
A esta problemática se suma la falta de cumplimiento del seguro de vida anunciado por el gobernador del estado Ricardo Gallardo el pasado 16 de enero. El compromiso era otorgar un seguro de un millón de pesos por cada bombero, pero hasta ahora no se ha entregado ni un solo documento que respalde su existencia.
La incertidumbre también rodea el manejo del dinero que reciben del municipio y de la zona metropolitana. “No sabemos cuántos recursos ingresan de los municipios, ni en qué se usan. El Patronato no nos da explicaciones y no tenemos acceso a esa información”, denunció Portillo.
El problema más urgente es el equipamiento de seguridad. “Los bomberos trabajamos con equipos desgastados, rotos y sin protección adecuada. En el incendio de ayer soportamos temperaturas de más de mil grados sin garantías mínimas de seguridad. ¿Hasta cuándo vamos a seguir así?”, cuestionó.
El panorama es alarmante, sin mejoras salariales reales, sin seguro de vida, sin equipo adecuado y sin transparencia en los recursos, los bomberos potosinos continúan arriesgando su vida sin el respaldo que merecen.
Los elementos piden respuestas claras y acciones concretas. Mientras tanto, siguen apagando incendios y salvando vidas, aunque nadie parezca dispuesto a rescatar los derechos que les corresponden.