La escultura de una bailarina que formaba parte del monumento en honor a Juan Manuel Quistián, El Rey del Wepa, ha desaparecido del jardín del barrio de Tlaxcala, desatando el enojo de vecinos y seguidores del icónico sonidero potosino.
El conjunto escultórico, inaugurado con gran celebración, fue impulsado por el Gobierno del Estado como un reconocimiento a la cultura sonidera. La obra del artista Juan Gorupo representa a Quistián con su consola de audio, bocinas y un cartel de baile, acompañado de otros elementos que reflejan la esencia del movimiento.
Sin embargo, la falta de vigilancia permitió la desaparición de una de sus piezas, dejando incompleto el homenaje.
Hasta ahora, las autoridades no han aclarado si se trata de un robo o si la escultura fue retirada con algún propósito específico. “La ciudad no cuida su propia historia. Es indignante que un monumento tan reciente ya haya sido vandalizado